Código propuesta de inversión: 7915
El barrio de Penya-Roja, ubicado en el distrito de Camins al Grau, ha experimentado en los últimos años un importante crecimiento residencial y demográfico, consolidándose como una de las zonas más dinámicas de València. Sin embargo, a pesar de contar con una población creciente y una vida de barrio activa, carece de un espacio público dedicado a la compra y distribución de alimentos frescos, de calidad y de proximidad.
Por ello, proponemos la construcción de un Mercado Municipal que sirva como infraestructura permanente para el abastecimiento del vecindario, fomentando el comercio local y el acceso a productos saludables. Este equipamiento municipal permitiría a las y los vecinos acceder a una oferta variada de frutas, verduras, carnes, pescados, pan y otros productos frescos, reduciendo así la dependencia de supermercados y grandes superficies, y apoyando al tejido agrícola y comercial de proximidad.
El mercado sería un espacio cubierto, accesible, con diseño sostenible y moderno, que contribuya a la cohesión social del barrio, impulsando la economía circular, la interacción vecinal y el modelo de ciudad de proximidad que promueve el Ayuntamiento.
Mejorar la calidad de vida de la ciudadanía del barrio de Penya-Roja mediante la construcción de un mercado municipal que facilite el acceso a alimentos frescos, de proximidad y de calidad, potencie el comercio local y promueva la sostenibilidad alimentaria y social.
Actualmente, el barrio de Penya-Roja carece de un mercado municipal propio, lo que obliga a la ciudadanía a desplazarse a otros barrios para acceder a este tipo de servicio público. Esto supone una limitación especialmente para personas mayores o con movilidad reducida. Además, la presencia de este equipamiento fomentaría el consumo de productos de cercanía, reduciría el uso del coche, generaría un nuevo espacio de socialización y reforzaría el tejido comercial y productivo local.
Este proyecto responde a criterios de bien común, sostenibilidad ambiental y económica, y cumple con los requisitos del proceso de presupuestos participativos, al tratarse de una infraestructura pública de nueva creación, inventariable, con impacto positivo directo en la ciudadanía.
Facilita el acceso a productos frescos y saludables.
Apoya al pequeño comercio y a los productores locales.
Reduce los desplazamientos innecesarios en vehículo privado.
Genera un espacio de encuentro comunitario.
Promueve un modelo de consumo responsable y sostenible.
Contribuye a una alimentación más saludable, especialmente en familias, personas mayores y población vulnerable.
A toda la ciudadanía del barrio de Penya-Roja.
A personas mayores y con movilidad reducida.
A familias con niños y personas con poco tiempo para desplazamientos largos.
A comerciantes, productores agrícolas locales y emprendedores de alimentación sostenible.